El pasado viernes estuve intentando aparcar por el distrito de Salamanca durante casi media hora. Me costó un verdadero esfuerzo porque no había plazas. Además, los dos aparcamientos privados en los que suelo aparcar en esa zona estaban completos. Ante este impedimento y siendo las 19.30 aparqué un tercio del coche en zona de carga y descarga. Me equivoqué y puse tiquet verde de 1,8 euros aún siendo zona azul. Pelele pero pensaba que eso a los topos les gustaba. Nanai. Cuando a las 22 horas regresé al coche tenía calzada en el parabrisas una multa de 180 euros, treinta talegos. Me cagué en su puta madre. Entiéndase por su al topo en cuestión y al político que marca las tasas.
Vamos a europeizarnos a hostias, estará pensando Gallardón. O no, a lo mejor está pensando que el derroche y el endeudamiento inconsciente que practica lo tenemos que compartir todos los madrileños. Estoy realmente cabreado y antes de utilizar la rebelión civil de algún amigo mío, voy a intentar acallar la guerra mofándome de los agentes de movilidad que son los últimos monos de este desconcierto. Son gente informe y uniformada que cree poseer la autoridad. Son fantoches chandaleros que tienen mucho peligro. Antes de cagarme en Madrid por culpa de régimen de terror impuesto en las aceras, voy a describir brevemente un par de episodios con estos fosforitos amagos de guardia urbano, chavales medio maderos que contentan la conciencia olvidada de sus padres:
El primer episodio aconteció en la plaza de Colón, a cosa así de las diez de un día entre semana cualquiera de invierno. Toda la castellana estaba parada y el agente de movilidad del semáforo dirección sur se negaba a dejar pasar a nadie aún cuando el semáforo estaba verde. Como el tiempo pasaba la gente de las filas lejanas empezó a pitar. El agente miraba a los coches y se dirigía a ellos enfervorecidamente. Los afortunados moteros de la primera fila pudimos escuchar las sandeces que decía:
- Pitad, pitad. Vais a joderos un disco más por haber pitado tanto.
- PIIIIIII PIIIIIII
- No me importa que pitéis -repetía- os váis a quedar otro turnito más.
- PIIIIIIIIIIIIII
- ¿Más pitadas? Más turnitos.
En sus ojos había cierto color encendido. El gilipollas se había tomado el atasco a lo personal. En esto un motero más despierto le propuso que dejara pasar a las motos. El agente chalado no oyó esto sino cualquier otra cosa y le respondió:
- Estos que pitan son los que causan que os quedéis parados otroooo turnito más.
- Ah, estos, estos son gilipollas, ni caso hombre. El inteligente motero le apuntó.
- Te has echado el rollo. Por eso que has dicho vais a pasar en el siguiente sólo las motos.
En el siguiente semáforo nos dejó pasar a las motos y yo me iba partiendo la polla de tan sonada voladura.
Vamos a europeizarnos a hostias, estará pensando Gallardón. O no, a lo mejor está pensando que el derroche y el endeudamiento inconsciente que practica lo tenemos que compartir todos los madrileños. Estoy realmente cabreado y antes de utilizar la rebelión civil de algún amigo mío, voy a intentar acallar la guerra mofándome de los agentes de movilidad que son los últimos monos de este desconcierto. Son gente informe y uniformada que cree poseer la autoridad. Son fantoches chandaleros que tienen mucho peligro. Antes de cagarme en Madrid por culpa de régimen de terror impuesto en las aceras, voy a describir brevemente un par de episodios con estos fosforitos amagos de guardia urbano, chavales medio maderos que contentan la conciencia olvidada de sus padres:
El primer episodio aconteció en la plaza de Colón, a cosa así de las diez de un día entre semana cualquiera de invierno. Toda la castellana estaba parada y el agente de movilidad del semáforo dirección sur se negaba a dejar pasar a nadie aún cuando el semáforo estaba verde. Como el tiempo pasaba la gente de las filas lejanas empezó a pitar. El agente miraba a los coches y se dirigía a ellos enfervorecidamente. Los afortunados moteros de la primera fila pudimos escuchar las sandeces que decía:
- Pitad, pitad. Vais a joderos un disco más por haber pitado tanto.
- PIIIIIII PIIIIIII
- No me importa que pitéis -repetía- os váis a quedar otro turnito más.
- PIIIIIIIIIIIIII
- ¿Más pitadas? Más turnitos.
En sus ojos había cierto color encendido. El gilipollas se había tomado el atasco a lo personal. En esto un motero más despierto le propuso que dejara pasar a las motos. El agente chalado no oyó esto sino cualquier otra cosa y le respondió:
- Estos que pitan son los que causan que os quedéis parados otroooo turnito más.
- Ah, estos, estos son gilipollas, ni caso hombre. El inteligente motero le apuntó.
- Te has echado el rollo. Por eso que has dicho vais a pasar en el siguiente sólo las motos.
En el siguiente semáforo nos dejó pasar a las motos y yo me iba partiendo la polla de tan sonada voladura.
El otro episodio de movilidad ocurrió el pasado sábado en la vorágine que se monta en Gran Vía los sábados por la tarde. No sé como pero acabé allí comprando una gilipollez y me comí el coche. En un semáforo de Callao estaba un agente de movilidad que por echar la bronca de una nimiedad a un coche (y por supuesto multarle), causó un mucho peor atasco. Cuando hubo terminado de apuntar los datos se lanzó al paso de cebra más cercano para dejar pasar a los coches que querían desviarse por ahí. En ese paso de cebra había muchísimos peatones compradores circulando sin importarles lo más mínimo la circulación vial. El agente bajo el brazo en la acera para hacer el signo de parar a los coches pero dirigido a los peatones. Le dio a un par de subsaharianos en la cabeza mientras apretaba el silbato (los negros salieron corriendo por si les estuviera deteniendo con esa extraña estrategia) y tardó alrededor de un minuto en hacer entender a la gente que debía ceder el paso a los coches.
Bueno, tras esta descarga, para compensar o recuperar la conciencia de cura que me ha impuesto la infancia diré que ojala pronto el manzanares tenga rivera y pueda usarla gracias al faraón. También entenderé el estrés del agente y me diré que cobran muy poco para la poca formación que reciben y la tarea de mierda que pueden tener encomendada. Pero, por favor, bajen las multas o que las paguen sólo los constructores.
Bueno, tras esta descarga, para compensar o recuperar la conciencia de cura que me ha impuesto la infancia diré que ojala pronto el manzanares tenga rivera y pueda usarla gracias al faraón. También entenderé el estrés del agente y me diré que cobran muy poco para la poca formación que reciben y la tarea de mierda que pueden tener encomendada. Pero, por favor, bajen las multas o que las paguen sólo los constructores.
5 comentarios:
Querido Juambo,
Veo que te has "desahogao"... Yo como pescador de chopitos tengo un problema con la autoridad... y no soy buen consejero y menos calmante para la enfermedad que te ataca, pero sí te diré algo...lo primero que "les jodan", lo segundo "la tienen pequeña", lo tercero "recurre a muerte", lo cuarto "que no te rayen, es su juego", lo quinto... te recomiendo para canturrear la canción "era un hombre y ahora es poli"... sabias verdades...
Saludos chopiteros y abrazos empatizantes!
Ye lo de siempre, tío. A un españolito de a pie le das un uniforme con gorra y si no te follan es porque llevan toda la mañana dale que te pego.
Acuérdate del basurero bajito del colegio. A mí me amenazó con el mocho porque tenía que limpiar el baño inmediatamente y me las vi y me las deseé para terminar la faena impoluto.
Querido Juambo,
Colecciono canciones contra las "fuerzas del orden" (del mal diría yo...) y aquí te brindo una a ver si te conviene...
LETRA DE LA CANCION LOS SUAVES - ANTISOCIAL (LP SAN FRANCISCO EXPRESS)
Toda la vida trabajando sin parar
para pagarte una fosa en el corral
"Robocop" que pasas por el metro
no se acercan no te quieren rozar.
¡Fantasma! ¿Les quieres disparar?
Sin tu chaleco antibalas no andas
quisieras darle ojos a la justicia
a esa ciega viciosa imposible de violar.
Antisocial.
Pierdes tu calma ganas de vicios.
Piensas en tus años de servicios.
Antisocial.
Esbirro de la ley y la justicia
tiempo perdido siglos y siglos de malicia.
Pasas el tiempo pisando a los demás
los molestas escupiendo al hablar
desesperado con algo de esperanza
ves que tu parte te la quieren quitar
planificas a tu aire la ciudad
la cabronada es tu forma de actuar
no estás solo levanta ya la vista
las mentiras de ayer hoy son verdad ... cuentista.
Antisocial.
Pierdes tu calma ganas de vicios.
Piensas en tus años de servicios.
Antisocial.
Esbirro de la ley y la justicia
tiempo perdido siglos y siglos de malicia.
Toda la vida trabajando sin parar
para pagarte una fosa en el corral
"Robocop" que pasas por el metro
no se acercan no te quieren rozar.
¡Fantasma! ¿Les quieres disparar?
Sin tu chaleco antibalas no andas
quisieras darle ojos a la justicia
a esa ciega viciosa imposible de violar.
Antisocial.
Pierdes tu calma ganas de vicios.
Piensas en tus años de servicios.
Antisocial.
Esbirro de la ley y la justicia
tiempo perdido siglos y siglos de malicia,
de malicia,
de codicia,
de malicia,
de justicia.
Antisocial.
Antisocial.
Antisocial.
Antisocial.
...
Saludos chopiteros! (esto no es de la letra, ja ja ja)
olas hermanos. a ver, ha llegado el padre 'estable', mentalmente eficiente y equilibrado sin igual. mi humilde opinion de casi-siempre-viadante anqe en ocasiones 4ruedero, es DE QUE estos hombres de harrelson de pacotilla tienen una enorme ventaja frente a los antiguos pitufitos: carecen de pistolón, que no a se a vosotros pero a mi me intimida y me da harto por culo por que no decirlo. eso vaya por delante. ahora bien, que algunos se creen el mismisimo churchill eso a facto huele. otro tema a a debatir son las multitas, joder con las mismas...constato la atrocidad. el coche en madrid huele a garaje. viva la pepa!
hola chicos. he estado ausente porque me he mudado de casa. antracita, 3 pegado al planetario. no os indico el código postal por si es caso que mandéis un paquete, lo tengáis que traer en la mano
se os saluda convenientemente
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