lunes, 18 de febrero de 2008

Esqui-mal


He visitado el pirineo aragonés este fin de semana. El objetivo del viaje era esquiar sábado y domingo en la estación de Formigal. Como compañeros de carretera unos amigos y muchos cacharros del equipamiento indispensable para practicar este deporte: botas lunares, largos esquies, abalorios contra el frio y un sinfin de complementos. Cuando me visto para entrar en pistas la imagen que me llega es la de los astronautas justo antes de entrar en la nave espacial con cara de gilipollas mientras caminan. También me invoca la de los caballeros andantes que marchaban a la batalla a meter mandobles y a jugarse la vida.

Siendo tan aparatoso y haciendo tanto frío como hace allí arriba, uno se pregunta por qué despierta tantas pasiones el famoso esquí. Se realiza impepinablemente en un entorno bello como lo es cualquier grupo de montañas enormes llenas de nieve. Esto gusta mucho pero no es suficiente porque la montaña está ahí aunque no deslices sobre la nieve y porque también parece un puñetero parque temático el invento de los remontes industriales y baretos cutres tipo Moncloaca. Además, me ha dicho mi primo que la foto de arriba no es ya real en España porque desde hace varios inviernos cada vez hay más calvas, y no precisamente alopécicas, en las pistas.
El punto de interés principal para mí es el riesgo que entraña ir a tanta pastillas montaña abajo con tan solo unos primitivos patines y tu juego de pesos corporales. El desafío de usar una técnica que cualquiera con bolsillo (gordos y delgados, jóvenes y viejos, pijos y tuneros) puede usar para poner en juego el equilibrio es interesante.

Uno siente que, como pasa a menudo de cerca, puede partirse una pierna o salir de pista y darse una buena galleta. Uno sabe de buena mano que la caída está ahí impérterrita a tus fallos y despistes. Pues bien, el saberse capaz de controlar esa situación, deslizarse a tanta velocidad sabiendo lo que puede suceder es lo que llama a la gente a las pistas. Ese sentido heroico y antígua causa común de salir con la armadura a dar palos a los bandarras que molestaban siquiera el honor de tu señor de turno. Modestamente, claro, que ya hay tele hasta en la China popular y entonces sabemos que el señor también orina y defeca.

Esto es lo que nos hace gastarnos tanta pastita fresca en la "auténtica gente de campo", esos inteligentísimos hombres y mujeres tan relajados y hospitalarios que nos acojen en sus humildes moradas. Lease casoplones, 4x4 de luxe y humores de perro como señal no única pero sí frecuente. Normal, la verdad. Es verdad que hay otras cosas complementarias y añadidas que aporta el campo cualquiera como es comer con hambre, dormir con sueño y beber con sed. Eso nos falta aunque parezca mentira que lo podamos añorar. Ay Mr. Gates, nos falta y no lo tiene windows ni con el service paquete rs.4,2.

PS. Hoy en la tele han puesto Rambo algo, creo que 3. Me he descojonado. Los muhaideen eran soldados santos que luchaban con su vida contra los rusos porque les habían quitado la tierra. Los tios eran bastante simpáticos y Rambo era una especie de consultor externo bondadoso que tenía mala leche cuando había que tenerla. A mí Stallone me cae bien porque inteligentemente no va de buen actor y porque no se mete en política confundiendo sus filmes. Aún así diré que esa consultoría externa americana le ha salido cara a medio planeta. Señores de la guerra, muéranse todos por favor.

4 comentarios:

Viernes dijo...

Que guaaaaapo!! Yo como aprendiz (debutante nos llaman) me lo he pasado de vicio. El hecho de deslizarse con tu equilibrio como dices es lo mejor, la velocidad... ya vendrá para los debutantes, no?
El tiempo magnífico, todo muy bien... casi tanto como Rambo III,... Claaaaroooo es que es de la época Reagan, cuando Osama Bin trabajaba para el imperio, cuando los ruskis eran los malos... Ah, qué tiempos... Antes de que los perro flautas copasen todo... ja ja ja, POR CIERTO, SERÁ POR ESO QUE VUELVEN LOS OCHENTA?? Inquietante...

Ángel dijo...

Deporte cabrón y desagradecido donde los haya. Y desde que abundan los tableros, mucho peor. Cuídese... 'Don Juan'.

Juambo dijo...

viernes, lo mejor me parece que son los inicios. luego he escuchado a mucha gente quejarse de lo repetitivo y eso. disfute.

angel, te veo con copei en la mano siempre y cuando me invites.

salud, j

Ángel dijo...

Estás oficialmente ivitado. Este viernes, ya tú sabes.